La cédula de habitabilidad verifica aspectos como:
- Seguridad estructural: Garantiza que la vivienda esté construida de manera sólida y estable.
- Condiciones higiénicas y de salubridad: Se revisan aspectos como la ventilación, iluminación natural, y la correcta instalación de sistemas de saneamiento.
- Aislamiento térmico y acústico: Se aseguran de que la casa tenga un aislamiento adecuado para hacer frente a las temperaturas exteriores y reducir los ruidos.
- Suministros básicos: La vivienda debe contar con acceso a electricidad, agua potable y saneamiento.
Aunque las casas prefabricadas suelen ser más rápidas de construir y más económicas, siguen estando sujetas a las mismas normativas que una vivienda tradicional. Obtener la cédula de habitabilidad garantiza que tu casa prefabricada está en conformidad con las leyes y que podrás disfrutarla sin ningún problema legal.
Además, es un documento necesario si en algún momento decides vender la casa o alquilarla, ya que sin esta licencia, la vivienda no será reconocida oficialmente como habitable. Incluso, es indispensable para realizar contratos de suministro de servicios como luz, agua o gas.
¿Cómo se obtiene la Cédula de Habitabilidad?
El proceso para obtener la Cédula de habitabilidad para una casa prefabricada es igual al de una vivienda convencional. Se deberá presentar el proyecto técnico elaborado por un arquitecto, donde se detallen los planos, materiales y características de la construcción. Una vez finalizada la obra, el Ayuntamiento o la entidad local competente realizará una inspección para comprobar que todo cumple con la normativa vigente.
Al obtener el informe técnico y presentarlo en el Ayuntamiento junto con la solicitud para la cédula de habitabilidad, el plazo para la resolución, por parte de la administración depende de la carga de trabajo y los procedimientos de cada administración local o autonómica pero, en términos generales, suele tardar entre 15 días y un mes. En algunas comunidades autónomas puede ser más rápido mientras que en otras, especialmente si hay mucho volumen de solicitudes, puede tardar hasta 2 meses.
El costo para obtener la cédula de habitabilidad también varía según la comunidad autónoma y el municipio, ya que cada región tiene sus propias tasas y requisitos, así que es recomendable consultar directamente en el Ayuntamiento de tu localidad para obtener información precisa sobre las tasas específicas y posibles variaciones en el costo del proceso. Orientativamente, para una vivienda unifamiliar, el precio suele estar entre los 70 y 160 Euros.
Si una vivienda no pasa la inspección para obtener la cédula de habitabilidad, el técnico (arquitecto, aparejador o ingeniero) que realiza la inspección emitirá un informe negativo detallando los problemas o deficiencias que impiden que la vivienda cumpla con las condiciones de habitabilidad. Estos problemas pueden ser, por ejemplo, daños graves en la estructura, como grietas, humedades o problemas con los cimientos, fallos en las instalaciones eléctricas, de agua, gas o calefacción, ventanas inadecuadas o mal ubicadas que no permiten la correcta ventilación o entrada de luz, problemas de saneamiento o higiene, como humedades excesivas, malos olores, etc. o falta de medidas de seguridad, como salidas de emergencia o accesos adecuados. Si esto ocurriera la vivienda deberá someterse a las reformas necesarias para corregir las deficiencias indicadas en el informe.
Para evitar estos problemas confía solo en profesionales. En CASAS KUBERA, te acompañamos en todo el proceso, desde la elección del diseño hasta la tramitación de licencias. Nos aseguramos de que tu nuevo hogar cumpla con todos los requisitos para que puedas disfrutar de él sin preocupaciones.
¿Estás listo para dar el primer paso hacia tu nueva casa prefabricada? Contáctanos y te asesoramos en cada detalle, incluida la obtención de la cédula de habitabilidad.